Artículo de Jerónimo Lloret. Casi despedíamos el año 2013 cuando el Ayuntamiento de Villajoyosa firmaba un convenio con Taylor Wimpey. Villajoyosa recibía un parque infantil público, la construcción del paseo marítimo, dos millones de euros y una parcela hotelera de casi 8.000 metros.
Por supuesto el PSOE, de la mano del actual concejal de Urbanismo Jaime Ramis, denunciaba el acuerdo al Fiscal anticorrupción, no por considerar que había alguna ilegalidad, sino por obstaculizar la acción del entonces gobierno del PP y sobre todo para crear la confusión entre los vileros de que el acuerdo presentaba tintes de corrupción.
Lo que Jaime Ramis y el PSOE no han dicho ni dirán es que, cinco años después, el Fiscal ni siquiera tuvo en consideración la denuncia, pues todo había sido conforme a la legalidad.

Jaime Ramis denunció el acuerdo a Fiscalía, el mismo acuerdo que ahora refrenda.
Ahora, ese tan denostado convenio que el PSOE criticó por activa y por pasiva ha servido para que el Ayuntamiento reciba algo más de 2.8 millones de euros. Ni que decir que, viendo los antecedentes, esto será obra y gracia de la gestión de Andreu Verdú, una nulidad política que pasará a la historia como el peor alcalde que ha tenido Villajoyosa, tanto es así que hasta en su propio partido lo quieren botar.
Pero lo que ese PSOE tan transparente ocultará son las presuntas reuniones previas en la pseudo sede socialista ubicada en un bar de la Ermita con el ex alcalde socialista Riquelme junto a algunos empresarios del sector hotelero, lugar desde donde actualmente se maneja la política vilera y se maneja a Verdú.

Andreu Verdú es manejado por el ex alcalde socialista
Tampoco dirán que el propio ex alcalde socialista Riquelme se personó en el salón de plenos acompañando a los que, a la sazón, han resultado ganadores de la subasta de la parcela hotelera después de que el precio se rebajase en 600.000 euros aproximadamente.
En mi pueblo dicen “pensa mal y acertarás”, pero ¿por qué íbamos a pensar mal de todo este asunto? ¿verdad?