Artículo de Jerónimo Lloret. Ayer el alcalde nos brindó una de las tantas entrevistas que ha otorgado en la radio comarcal Onda Cero para explicar las deidades conseguidas bajo su mandato, que a día de hoy no hay ninguna.
Tres años después, Andreu sigue insistiendo en que la culpa de todo es del Partido Popular con un tono ensoberbecido del que se sabe victorioso porque no va a encontrar oposición política por muchas acusaciones que lance y que tampoco encontrará preguntas incómodas al otro lado del micrófono.
En esta ocasión han sido solamente 24 veces las contabilizadas en que el alcalde, con un pésimo e ininteligible discurso, se ha acordado del PP. La mayoría de ellas a través de inculpaciones falsas y opiniones sesgadas que no se sustentan en datos demostrables y que no pueden encontrar respuesta del acusado.
Puede que para el ciudadano de a pie, esta sea una polémica innecesaria, pero créanme que no es de buen recibo que una persona, y más un alcalde, se dedique a difamar con mentiras y medias verdades la labor que muchas personas han hecho por la Vila.
Le diré una cosa, señor Verdú, cuando usted y los suyos no sabían ni dónde estaban las escaleras para subir al salón de plenos, nosotros ya sabíamos estar en el gobierno y en la oposición.
Puede estar tranquilo que ya he hablado con mis compañeros de grupo y no hay inconveniente en que, cuando finalice su mandato, darle una foto de todos los integrantes del grupo popular firmada para su recuerdo.
Así que dedíquese a mentir menos y a hacer algo por la Vila, que solo aprovecha el tiempo ante el micrófono para atacar a sus rivales. Igual es porque poco o nada hay para ensalzar de su gestión. ¿No cree?