Por Pepe Lloret. Extraído de «El Popular de La Vila«
La semana pasada encontré una noticia que recogía las conclusiones de un informe sindical sobre la situación del empleo en el sector turístico de Benidorm y que ponía de manifiesto la falta de intención de crear empleo en los hoteles de la citada ciudad. Es un tema que nos preocupa a todos pero no me sorprenden las conclusiones del informe ya que todas las empresas que se han mantenido ha sido gracias a los ajustes en sus gastos, siendo uno de los costes con más peso en este tipo de industria el de personal.
Es aquí donde los hoteles han redimensionado sus plantillas con el fin de recuperar productividad. Todas las poblaciones cercanas a Benidorm somos exportadoras netas de servicios, productos y mano de obra pero hasta que no se consolide la recuperación y las empresas presenten una rentabilidad aceptable para sus propietarios y accionistas no crearán empleo.
Llegados a este punto, ¿dejamos de leer y nos deprimimos?. ¿Se lanzan las administraciones a crear empleo público sin freno? es una solución, siempre y cuando se generen los ingresos suficientes para pagar la deuda actual y soportar una carga de mano de obra sin una aplicación real. Tendríamos que inventar servicios públicos al estilo griego además de ser imposible con la nueva ley de racionalización y sostenibilidad de la administración local.
Deducimos que es la iniciativa privada la vía más sostenible, siendo la única con capacidad de inversión y agilidad operativa. ¿No sabemos buscar oportunidades en nuestro entorno más inmediato?. Nuestra ciudad tiene un producto cargado de autenticidad que debe convertirse en el complemento turístico de la comarca. ¿Dónde está?. En nuestra historia, en nuestros paisajes y en la fuerza de trabajo cualificada de nuestros vecinos, nos falta configurar el departamento comercial, compuesto por toda la ciudad. Ahora nos hace falta el mensaje.
La Vila ocupa una extensión de 59,25 km2 con una franja litoral de 14 km. En ella, conviven parajes naturales y once playas, cinco de las cuales poseen el distintivo europeo de excelencia, reconocimiento que también posee el club Náutico. Actualmente somos una ciudad de servicios enfocada al turismo. Simultáneamente estos servicios conviven con industrias del sector primario como la pesca y sus actividades complementarias. Además, la ciudad posee un puerto pesquero que alberga la segunda flota de amarre de la provincia y una industria chocolatera con fábricas de reconocido prestigio internacional.
Pero la Marina Baixa carece de una oferta cultural sólida y de calidad, siendo este nicho de mercado el que viene a cubrir nuestra ciudad con su amplia riqueza patrimonial, su experiencia en la interpretación y su compromiso con la accesibilidad total, un enfoque nuevo en la museografía y que demuestra un alto grado de compromiso con la sociedad y nuestros visitantes. Nuestro término municipal se encuentra escasamente urbanizado y es por eso que nuestros espacios ofrecen grandes posibilidades para el desarrollo de servicios turísticos innovadores como los parajes del pantano del Amadorio, un puerto deportivo muy dinámico y con unas excelentes instalaciones para las embarcaciones de recreo, instalaciones deportivas, etc.
Otro de los pilares de la oferta turística es la existencia de un calendario festivo en el que resaltan los Moros y Cristianos, fiestas declaradas de Interés Turístico Internacional y dentro de él, original y espectacular acto central, el Desembarc. En Villajoyosa se asienta en ella una de las colonias noruegas más antiguas de España que recientemente está generando un efecto llamada a sus compatriotas, siendo los principales atractivos la calidad de la gastronomía local y el creciente posicionamiento como destino turístico cultural a través de la difusión del proyecto VILAMUSEU, donde el nuevo museo será una de las piezas clave. La característica de este edificio es la conservación de la fachada del antiguo colegio Dr. Esquerdo que ha permito respetar la imagen de la calle y que oculta una estructura diseñada por un equipo multidisciplinar en el que han colaborado junto con el arquitecto, arqueólogos, usuarios de la instalación y especialistas en accesibilidad integral.
Esto ha permitido que en breve se inaugure con el título de MUSEO MÁS ACCESIBLE DE EUROPA. La apuesta conjunta de la GENERALITAT y VILAMUSEU por una oferta turística experiencial y de calidad supone un enriquecimiento de la marca turística de la Costa Blanca, incrementando su valor ante otros destinos emergentes. Este carácter innovador y de colaboración con otras administraciones y entidades públicas y privadas junto con la consideración de nuestro patrimonio como un recurso económico, permite desarrollar proyectos pioneros en Europa y únicos en el Mediterráneo, siendo el exponente de referencia las visitas subacuáticas al pecio Bou-Ferrer.
Este septiembre se llevarán a cabo un centenar de visitas piloto durante el período de excavación con la finalidad de diseñar los protocolos que permitan en 2014 abrir al público este yacimiento tan extraordinario. Abrir un yacimiento de las características del pecio Bou-Ferrer con el valor añadido de disponer simultáneamente de un espacio en el museo para su interpretación es consecuencia de la filosofía de VILAMUSEU, donde entendemos que la divulgación participativa es la mejor opción para llegar al público. La transparencia en todas las actividades del museo ha derivado en un diseño del edificio sin intimidades, donde los visitantes podrán contemplar las actividades que se desarrollan en tiempo real en los laboratorios de conservación. No se trata de un espacio expositivo al uso, sino más bien de un recorrido experiencial.